El día 25 de febrero, primer sábado de Cuaresma, tuvo lugar un retiro cuaresmal, al que asistieron doce personas, que meditaron sobre la humildad, como centro de las pláticas y oraciones. En una primera reunión se realizó una aproximación al concepto de la virtud moral adquirida de humildad, prácticamente imposible de conseguir por medios puramente humanos, por lo que es necesario pedirla a Dios y ser fieles a las gracias recibidas. Una segunda plática relacionó la humildad y la configuración en Jesucristo y la Virgen María. Por último, se meditó sobre la humildad y la discreción y discernimiento. Se hizo referencia, al final, a la figura de Santa Teresita de Lisieux, junto a Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz, como paradigmas de relación entre humildad y discernimiento. Las personas asistentes contaron con textos para meditar del Evangelio, de Reginald Garrigou Lagrange, José Rivera y José María Iraburu. Al final, dos Sacerdotes de las Parroquias de Las Cabezas confesaro